Después de 3 meses en Martinica, incluido un mes en Francia -un "descanso no siempre agradable"-, Sarah, Aurélien y Nael vuelven a los placeres de la navegación y a la alegría del océano. Siempre es especial quedarse en un lugar durante mucho tiempo, y todos están contentos de volver a navegar. Incluso aprovecharon para navegar a sotavento de Santa Lucía y sacar el spinnaker para planear un poco. Hacía mucho tiempo que no lo hacían.
Los fondeaderos son numerosos en esta isla caribeña de 620 km2, bordeada por el mar Caribe y dotada de montañas muy afiladas, los Pitones. En el programa, rema, camina, nada y bucea para descubrir la rica fauna.
Sarah y Aurélien también disfrutan de los paisajes montañosos de la isla con un descubrimiento de la selva tropical. Este episodio también nos permite descubrir a algunos lugareños - pescadores, guías - que nos explican su trabajo y comparten con nosotros un pequeño momento de la vida, tan alejado de los nuestros que viven en grandes ciudades de hormigón...
