Ficha técnica Solicitud de información
El Amel 50 fue diseñado para una clientela que busca un barco de vela Amel con dimensiones más accesibles. El astillero ha tenido en cuenta la experiencia y las observaciones de sus clientes, en particular de los propietarios del Amel 55, para diseñar este nuevo modelo. El pliego de condiciones se elaboró en colaboración con el arquitecto naval Olivier Racoupeau.
Un casco moderno
Con este nuevo modelo lanzado en 2017, era necesario modernizar la marca conservando los fundamentos de Amel: facilidad de manejo, seguridad y calidad de construcción. Con un casco mucho más ancho, especialmente en la popa, se adoptó la solución de dos barcos y el aparejo de sloop fue una elección obvia: generosamente aparejado, el Amel 50 es un barco de alto rendimiento que está muy bien equilibrado a vela. El aparejo de balandra y la anchura del casco también han permitido ampliar la bañera y el espacio habitable en la parte trasera de la cubierta, una característica muy apreciada por los nuevos viajeros.
Para su fabricación en el astillero de La Rochelle, Amel conserva el control de todo el proceso: laminación de cascos, cubiertas y pequeñas piezas, fabricación de carpintería y ebanistería, preparación de mástiles, herrajes de cubierta, instalación de sistemas eléctricos y sanitarios, etc., y, por último, botadura, preparación y manipulación de los barcos. Los cascos y las cubiertas son de infusión (monolítica para la obra viva y en sándwich para la obra muerta y la cubierta). Todos los mamparos, suelos y muebles están pegados y laminados al casco y la cubierta. Esta construcción contribuye a la rigidez del barco en su conjunto y garantiza una gran solidez y una calidad de construcción muy elevada.
Una pareja que puede recibir a sus amigos
En cuanto a la distribución, el 50 está disponible en una única versión: un gran camarote doble de armador en la popa, un camarote doble de invitados en la proa y otro camarote con dos literas, a menudo destinado a los niños. El programa de navegación se ajusta a esta disposición: una pareja que suele navegar sola, pero que quiere poder entretener a sus hijos, nietos o amigos. Y para llevar a estos pasajeros en largos cruceros, se han previsto grandes espacios de almacenamiento (taquillas bajo el suelo, bajo los asientos y bajo las camas, numerosos armarios, roperos, gran taquilla de popa en la cubierta).
Diseñado para una pequeña tripulación
El Amel 50 se controla completamente desde la cabina. La vela mayor, la vela de estay y el génova tienen enrolladores eléctricos. Y hay un enrollador disponible para el gennaker. El timonel tiene todo a su alcance sin abandonar la protección del refugio rígido.
El Amel 50 mantiene la disposición de la cubierta Amel con una bañera central profunda y protegida. Sin embargo, ahora es más amplia y larga, y también más accesible. La apertura a la cubierta de popa está especialmente bien pensada: la comunicación y el movimiento con el resto del barco son más fluidos.
Un servicio posventa atento y eficaz
Amel tiene fama de ofrecer un alto nivel de servicio. Los propietarios de yates Amel lo saben. El astillero está siempre presente para ayudarles a resolver sus problemas gracias a un servicio posventa gestionado directamente por los equipos de Amel. Incluso si el yate está en el fin del mundo (lo que suele ocurrir con los yates de Amel), se encontrará una solución. Pero para ello es necesario conocer y validar los equipos instalados a bordo. Así, la lista de opciones sigue siendo limitada y controlada.
Elegir un Amel significa formar parte de una gran familia. Una comunidad de navegantes que quieren viajar de forma segura, cómoda y sin preocupaciones.
