Todos los años, el astillero Amel invita a sus propietarios a una reunión amistosa. Es una oportunidad para estrechar lazos entre los propietarios y mantener un estrecho contacto con el astillero. Para 2023, los veleros Amel se reunieron en Porquerolles. No menos de 12 modelos estaban amarrados en los muelles de esta soleada isla.
Los últimos modelos en el punto de mira
La mayoría de los yates presentes representaban los últimos modelos del astillero. Había 3 Amel 50 y 5 Amel 60. Tres Amel 55 y un Amel 64, más antiguo y todavía aparejado como ketch, completaban esta atractiva flota. En los espejos de popa ondeaban banderas de muchas nacionalidades: alemana, estadounidense, inglesa y también francesa. No faltaron los intercambios entre los barcos en todos los idiomas
La Amel Cup Med no es una regata. De hecho, estos veleros no están diseñados para competir entre 3 boyas. Sin embargo, durante 3 días se trazaron recorridos alrededor de Porquerolles, y las ganas de luchar de cada tripulación se palpaban en el pantalán antes de la salida.
Participación en un Amel 60
Para la ocasión, embarcamos en un Amel 60. Hay que acostumbrarse a navegar en este tipo de barco. De hecho, casi todo a bordo es automático. El timonel, en este caso el propietario, gobierna su yate con la punta de los dedos, gracias a sus diversos joysticks. Aquí se enrolla el foque, aquí se ajusta el carro de la mayor, aquí se trima el génova...
A la tripulación sólo le queda disfrutar del paseo, admirando todos estos hermosos barcos juntos en un tramo de agua tan maravilloso como siempre.
Navegación y degustación
En esta edición, la Amel Cup Med se encontró con condiciones de viento flojo el primer día, con recorridos bastante cortos hacia el norte de la isla. Afortunadamente, el sábado, día de la tradicional circunnavegación de la isla, el viento arreció y se pudo completar la circunnavegación de este a oeste, pasando por el sur de la isla. Como buenos navegantes, cada uno pudo navegar a su ritmo, aprovechando al máximo el buen tiempo.
Pero la Amel Cup Med también significa reencuentros entre las tripulaciones y el astillero, con estupendas veladas en algunos de los mejores restaurantes de la isla y eventos como una visita a la finca vinícola de Courtade y una cata de vinos.
