Un velero para disfrutar de la vida en el agua
Cuando Sunbeam Yachts diseñó el nuevo Sunbeam 32.1, el constructor austriaco partió de la observación de que, en Austria, un yate sólo está realmente navegando el 10% del tiempo. Por eso decidió construir algo que fuera principalmente "para divertirse" y para la vida en el agua, el tiempo fondeado. Rompió así muchos códigos, trabajando tanto con su arquitecto naval habitual, J&J, como con el diseñador industrial Gerald Kiska.

Apertura al mundo exterior
El resultado es un diseño que es, como mínimo, distintivo. Los elementos de estilo son a veces un poco excesivos, pero no dejan indiferente. El gran acristalamiento trapezoidal del casco en la parte delantera acentúa un asombroso quillote ascendente. El enorme sprit contribuye a una mayor superficie de cubierta, donde la proa invertida podría haberla reducido. Una gran ventana delante del techo completa la apertura de la cabina hacia el exterior.
Con un desplazamiento de más de 4 toneladas para una eslora de 9,98 metros y una manga de casi 3 metros, está claro que el Sunbeam 32.1 no es un barco de regatas. No obstante, sus 60 m2 de superficie vélica deberían permitirle disfrutar de unas cuantas viradas.
Vivir cómodamente en cubierta
La bañera, dispuesta clásicamente en torno a una mesa central, dispone de dos ruedas de timón, en torno a las cuales se concentran las maniobras, con 2 winches a cada lado. Estos dos apretados puestos de mando dejan el resto del espacio para relajarse en el agua.

El amplio espejo de popa es abierto y, en lugar de la clásica plataforma basculante que cierra la bañera cuando está en posición elevada, Sunbeam ha optado por un sistema telescópico. La plataforma, de tamaño XXL para un 36 pies y con un moderado francobordo de popa, se repliega mediante gatos eléctricos bajo el suelo de la bañera. Por eso, bañarse en verano en los grandes lagos austriacos es muy cómodo

Incluso navegando, los pasajeros podrán descansar cómodamente en la cubierta de proa, explica el astillero. Con el techo extendiéndose a los lados, muy por delante de la ventana delantera, disponen de un espacio seguro para sentarse o tumbarse y disfrutar de las vistas.

Un interior hogareño
Una vez dentro del barco, se descubre un interior completamente abierto, inundado de luz tanto por el techo como por las ventanas del casco.
El pique de proa se utiliza como zona para dormir, con vistas a la parte delantera, mientras que un salón en forma de U puede alojar a personas.

A babor, la cocina parece una cocina doméstica, con un sorprendente armario de almacenamiento cerrado por una persiana corredera.

A estribor, el Sunbeam 32.1 dispone de un cómodo cuarto de baño con ducha integrada.

En la popa, una litera doble transversal se encuentra bajo el suelo de la bañera. En el mamparo de popa, que separa la sala de máquinas de la zona técnica, las puertas con herrajes integrados están ingeniosamente dispuestas.


El Sunbeam 32.1 tiene un precio de unos 220.000 euros, dependiendo de las opciones.