Clasificado 2º en la última edición del Global Solo Challenge, este velero de 40 pies demostró su fiabilidad durante esta vuelta al mundo sin escalas, cubriendo la misma ruta que los participantes en la Vendée Globe. La navegante australiana Elizabeth Tucker ha elegido este barco para participar en la próxima edición del GGR.
Un 40 pies de eficacia probada

En manos del estadounidense Cole Brauer, este diseño de Owen Clark terminó en segunda posición en el último Global Solo Challenge. Sencillo, fiable y de proa recta, demostró cualidades de navegación que le permitieron seguir el mismo rumbo que los barcos IMOCA en la Vendée Globe.

Para su primera participación en el Desafío Global en Solitario, Elizabeth Tucker se ha puesto las pilas. Tras una exitosa carrera en finanzas en el sector de las energías renovables, Elizabeth ha tomado la audaz decisión de alejarse del mundo empresarial en 2023 para perseguir su sueño de dar la vuelta al mundo en solitario sin escalas.
Con un enfoque típicamente anglosajón, alejado de los usos y costumbres franceses, Elizabeth se lanzó de lleno a su proyecto, sin haber pisado nunca un barco hasta hace dos años.
Un agarre XXL
Para entrenarse y conocer lo mejor posible su nuevo barco, Elizabeth va a dar media vuelta al mundo. Acompañada por Cole Brauer, debe llegar a Australia desde Europa, pasando por el Cabo de Buena Esperanza.

Allí contará con el apoyo de su capitán, Mitch White, un experimentado navegante que ha participado en una veintena de Sidney Hobarts, así como en la Volvo Ocean Race de 2007.

Cole Brauer mira hacia la Vendée Globe 2032
Por su parte, Cole Brauer prosigue su desarrollo en el sector de las regatas oceánicas. Actualmente, en el equipo Malizia de Boris Herrmann, está elaborando meticulosamente sus planes para participar en la Vendée Globe. Consciente de que el plazo para inscribirse en la edición de 2028 ya es muy ajustado, tiene la vista puesta en la siguiente, en 2032.