Proyecto Duracell: Prueba del depósito a presión y acondicionamiento de la cocina


Continúa la transformación del Duracell Open 60 en un yate de crucero. Tras reparar las fugas del depósito de combustible, Matt realizó una prueba de presión del aire. A continuación, acondicionó la cocina y perfeccionó el congelador.

Pruebas de reparación de tanques

En el episodio anterior, Matt localizó y reparó fugas en el depósito de agua, detectadas durante una prueba inicial llenándolo de agua. Esta vez, tras completar las últimas escotillas de inspección en los compartimentos superiores, utilizando un método ya probado, optó por un método más económico y fiable, generalmente utilizado para probar los tanques: los presurizó. Con la misma bomba que utiliza para crear vacío al estratificar, inyecta aire hasta alcanzar una presión de 0,1 bares, medida en un manómetro. Al mismo tiempo, rocía las zonas sensibles con agua jabonosa para detectar posibles burbujas, sinónimo de fugas. Al cabo de 2 horas, cuando la presión se mantiene constante y no se detectan burbujas, la prueba es concluyente.

Acabado de la cocina

Matt ya puede construir tranquilamente el resto de la cocina alrededor del depósito de estribor. El congelador, fabricado anteriormente, se cubre con una última capa de aislamiento de aluminio, antes de instalarse definitivamente en su lugar en la cocina.

A continuación, Matt creó el resto de los armarios, asegurándose de poder desmontar algunos de ellos para vigilar el depósito. Así que hizo puntos de epoxi en el sándwich para evitar que las juntas atornilladas aplastaran el núcleo del sándwich.

Por fin se recorta una superficie de trabajo provisional para poder trabajar dentro del barco y ver también cómo será la distribución final.

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