NETTINOX para combatir la oxidación del acero inoxidable marino: lo que debe saber sobre este gel pasivante


El acero inoxidable no es eterno en un barco. Balcones, cornamusas y puntales pueden oxidarse, incluso en pocas semanas. Un gel pasivante promete detener este deterioro, eliminando el óxido sin necesidad de fregar. Hemos probado NETTINOX de Matt Chem.

El mantenimiento del acero inoxidable es una obligación para todo navegante. Aunque el acero inoxidable resiste bien el aire salado, sigue siendo vulnerable a las picaduras de corrosión, sobre todo si no se trata adecuadamente. Para hacer frente a este problema, un gel de triple acción está haciendo olas: NETTINOX.

Limpieza del acero inoxidable sin acción mecánica: una ventaja para facilitar el mantenimiento

Las picaduras de óxido en el acero inoxidable marino aparecen rápidamente, sobre todo después de pasar el invierno o de navegar sin enjuagar. En estos casos, la ventaja de utilizar un gel antioxidante es que funciona sin frotar. Basta con aplicarlo con un pincel, dejarlo actuar de 7 a 12 minutos y aclarar. Este proceso es interesante para los propietarios que quieren evitar los microarañazos causados por la abrasión, sobre todo en los tubos pulidos.

Pasivación: un paso decisivo para evitar la reaparición del óxido

Acero inoxidable tratado no significa acero inoxidable protegido a lo largo del tiempo. El papel del gel pasivante es fundamental en este caso. Por acción química, reforma la capa de óxido de cromo de la superficie, una barrera natural contra la corrosión. Este fenómeno, bien conocido en la industria, rara vez se tiene en cuenta en el mantenimiento rutinario. Sin embargo, es decisivo para evitar la reaparición del óxido, sobre todo en las embarcaciones que permanecen a flote.

Entrar en los recovecos: un formato de gel bien adaptado

Los puntales, las bases de pescante o los tornillos de los cadenotes tienen zonas complejas inaccesibles para cepillos o estropajos abrasivos. En estos casos, el formato semigel proporciona una adhesión óptima a las superficies verticales. Se adapta a la forma de las piezas sin correrse y permanece en su sitio durante toda la acción. Esta propiedad facilita un mantenimiento específico, sin desmontaje, incluso navegando o fondeados.

Aplicación: algunas reglas sencillas

El tratamiento requiere algunas precauciones básicas. Es aconsejable evitar aplicar el producto a la luz directa del sol, para no acelerar la evaporación. El olor ligeramente ácido es indicativo de una reacción química activa: se recomienda encarecidamente el uso de guantes y gafas. Tras la aplicación, aclarar abundantemente con agua dulce para eliminar los residuos ácidos y proteger las superficies circundantes.

Dosificación y rendimiento: un producto listo para usar

Un bote de 250 ml cubre unos dos metros cuadrados. Esta cobertura es ideal para el mantenimiento ocasional a bordo, sin exceso de material. Los envases más grandes (1 litro) están destinados a profesionales o barcos con mucho equipo de acero inoxidable. En todos los casos, la dosificación precisa y la aplicación con brocha limitan los residuos y se centran en las zonas a tratar.

NETTINOX: 20,50 Âeuros en tarro de 250 ml (precio 2025)

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