Con demasiada frecuencia oímos historias de accidentes de lanchas a motor, en las que el conductor se ha caído al agua y continúa con su paseo salvaje, arriesgándose a herir a otros navegantes, nadadores o incluso a dañar otras embarcaciones. Esto tampoco está exento de peligro para el patrón, que ve cómo su barco se aleja, mientras él permanece en el agua. Una situación que puede crear una escena de pánico y que podría evitarse gracias al disyuntor!

El disyuntor se conecta antes de arrancar el motor y detiene el encendido en caso de expulsión del piloto: el motor se apaga inmediatamente. Este dispositivo es obligatorio en las motos acuáticas y embarcaciones con motor fuera de borda con una potencia superior a 4,5 kW (6 CV) y en todos los modelos de timón.

Así que no te olvides de conectar el disyuntor antes de arrancar el barco Aunque sea obligatorio tener uno a bordo, no es obligatorio llevarlo. Sin embargo, es una cuestión de lógica y sentido común

NO NAVEGUE NUNCA SIN CONECTAR EL DISYUNTOR AL PILOTO!
Para mayor comodidad, le aconsejamos que se lo ate alrededor del muslo. De este modo, no estorbará al maniobrar y no se enredará en el volante.

Tenga un segundo disyuntor a bordo, porque si el piloto se cae por la borda con el primero, no podrá volver a arrancar el barco. Déjelo en un lugar accesible e informe a sus pasajeros de su presencia. Como recordatorio, cada fabricante tiene su propio interruptor de apagado, así que no intentes usar un dispositivo Yamaha en un motor Honda.

En el siguiente vídeo, se ve una lancha Riva navegando sin piloto en medio del lago de Zúrich. Mientras el piloto ha caído al agua, la embarcación sigue navegando, antes de ser interceptada por la policía local. El policía se armó de valor y saltó a la lancha y cortó el acelerador. Más miedo que daño, pero otro accidente que podría haberse evitado si el piloto hubiera utilizado su interruptor de parada