Poner una lancha motora en el agua no es algo que se pueda improvisar. Una comprobación rigurosa de todos los sistemas permite navegar con tranquilidad y evitar sorpresas desagradables. Tómate tu tiempo para hacer las cosas en el orden correcto, porque el mar no le hace ningún favor a nadie.
El motor, el corazón del barco
Lo primero en lo que hay que pensar al desinvernar la embarcación es en el motor. Lo primero que hay que comprobar es el nivel y el estado del aceite del motor y del refrigerante (para motores intraborda). A menudo se recomienda un cambio de aceite antes de volver al servicio. Inspeccione también el ánodo, la hélice, las abrazaderas y las mangueras. Cualquier rastro de corrosión u óxido debe hacer saltar la alarma.
Compruebe también que la bomba de agua funciona correctamente. Si no se ha sustituido recientemente, ahora puede ser un buen momento. Si es posible, prueba el arranque en seco, fuera del agua, utilizando un sistema de refrigeración adecuado, para evitar sorpresas desagradables el gran día.

El sistema de combustible, en busca de agua e impurezas
Durante el almacenamiento invernal, el combustible puede contaminarse con agua o impurezas, sobre todo el gasóleo. Por ello, es imprescindible vaciar los decantadores, limpiar los filtros y, si es necesario, sustituirlos. Una manguera porosa o agrietada puede provocar una avería o una fuga peligrosa.
La batería, para evitar quedarse sin electricidad
Una batería descargada o en mal estado puede dejarte tirado en el pantalán antes incluso de salir. Recárgala completamente antes de salir, comprueba su tensión y el estado de los bornes. Si la batería muestra signos de debilidad (tensión inferior a 12,4 V tras la carga), lo mejor es sustituirla. Limpiar los bornes y aplicar un producto anticorrosión prolongará su vida útil.

El casco y los apéndices: un control visual esencial
Es esencial dar una vuelta completa al casco en busca de grietas, ampollas de ósmosis o zonas escamadas. Aproveche para limpiar el casco con agua limpia y aplicar una nueva capa de antiincrustante si es necesario. Compruebe también el estado de la hélice, el timón y los flaps. Sustituya cualquier pieza dañada o doblada.

El sistema eléctrico y la electrónica de a bordo
Antes de zarpar, asegúrate de que todos los equipos eléctricos funcionan: luces de navegación, VHF, GPS, sonda, etc. Inspeccione los cables, fusibles y conexiones. Pruebe cada equipo y, si es necesario, resincronice o actualice los sistemas electrónicos.
Equipamiento de seguridad: una obligación legal
Compruebe a fondo su equipo de seguridad . Comprueba las fechas de caducidad de los fusibles, extintores y chalecos automáticos. Cuente el número de chalecos salvavidas, compruebe las luces, las balizas y el botiquín. Asegúrate de que el número de extintores se ajusta a tu categoría de embarcación. Siempre es útil hacer una comprobación cruzada con la lista oficial del gobierno.

Portadas y otros lienzos
Algunos barcos tienen un toldo o bimini. Comprueba todos los cierres, el tejido y las costuras. Limpie las cubiertas, engrase las bisagras o los deslizadores y asegúrese de que se pliegan correctamente. Un bimini mal ajustado puede convertirse rápidamente en un peligro para la navegación.
Confort y equipamiento de amarre
Bombas de achique, aseos, sistema de agua dulce, nevera, mesa de bañera, molinete eléctrico... Todo debe probarse antes de la botadura. Una bomba de achique averiada puede ser dramática si entra agua. Comprueba también los cabos de amarre, las defensas, la cadena y el ancla, que son todos accesorios de seguridad.

Caja de herramientas y piezas de repuesto
Siempre útil, no olvides llevar a bordo un pequeño kit de averías que contenga herramientas básicas, un juego de fusibles, bombillas de repuesto, cinta adhesiva, algunas abrazaderas y mangueras, y una lata de aceite para el motor. Esto puede salvarte en caso de un problema menor.
Documentación y papeles del buque
Por último, un punto que a menudo se olvida: la documentación. Comprueba que el carné de conducir, el seguro, el certificado de matriculación (o "acte de francisation") y la viñeta anual (para embarcaciones fluviales) están al día. Tener una copia digital en el móvil puede ser muy útil si alguna vez te hacen un control.