¿Qué solución se puede encontrar para garantizar que los jóvenes tengan fácil acceso a los deportes acuáticos? Una empresa inglesa intenta dar respuesta a este problema, que ve cómo la población de marinos envejece peligrosamente. Su idea: la lancha Maverick.

El vehículo, de 3,35 m de longitud, está diseñado para funcionar en varios modos. Si falta el viento, se puede considerar como un remo y remar hacia adelante. Muy ancho (1,30 m), ofrece muy buena estabilidad y su volumen ofrece muy buena flotabilidad.

Si el viento se levanta, entonces puedes instalar dos calcetines en los laterales y apilar un mástil. Con el timón y la orza, el Maverick se convierte en una pequeña embarcación auxiliar capaz de navegar con 2 personas (155 kg de carga máxima). El casco (43 kg) está fabricado en polietileno y es resistente a todo tipo de torturas. Sigue siendo tan estable como siempre, pero también le permitirá navegar en posición vertical. El Maverick se entregará con 2 tamaños de vela (5 y 6,25 m2) para adaptarse al viento y a la tripulación.

Por último, los aficionados al windsurf también podrán aparejar un mástil de tabla y navegar sin timón.

Disponible a partir de 3.400 euros, el Maverick es muy fácil de usar y divertido de jugar. Estará presente en La Rochelle en el Grand Pavois 2019, donde incluso podrá probarlo.
