Un viaje lejos de las carreras oceánicas
William Mathelin, arquitecto diplomado, creció en París, lejos del mundo de las carreras oceánicas. Descubrió la navegación durante las vacaciones familiares en las Islas del Canal, y luego durante los cruceros familiares. Durante sus estudios, también participó en regatas IRC, hizo convoyes, navegó en doble y luego en solitario. Y fue a través de un familiar -dos participaciones en la Mini Transat- que descubrió las carreras oceánicas.
Tras su graduación, se embarcó en un proyecto para la Route du Rhum 2018. Un sueño que un patrocinador le permite realizar. A sus 24 años, es uno de los competidores más jóvenes de la regata y navega con los colores del Beijaflore.
"¡Fue una apuesta loca! Mucha gente pensaba que no lo lograría. Y eso fue aún más motivador! También tuve que vender el proyecto, y como patrón más joven de la regata, me permitió destacar. Fue un gran descubrimiento Terminé en el puesto 16 e de 53 e . Definitivamente, ¡el objetivo se ha cumplido! Sobre todo porque esta edición del Rhum era complicada para todos. En retrospectiva, fue una apuesta atrevida, sobre todo porque nunca había navegado en un Clase 40. Tenía que aprenderlo todo, descubrirlo todo" explica el joven patrón.
Y para ello, William Mathelin abandona la jungla parisina por los pantalanes de Lorient.
"Quería estar en el centro del proyecto, trabajar con grandes patrones, tener a los proveedores al lado. También tenía un especial apego a la navegación en la medida de lo posible. Empecé bastante tarde el 2018, la única forma de superarlo fue conocer el barco de memoria. Hice toda la preparación acompañado de otras personas. Estuve presente en todas las etapas para compensar cualquier problema en el mar. Tuve que suplir mis carencias, ya que no procedía de una formación náutica clásica dice William.
A la vista de sus resultados, su socio decidió involucrarse con él un año más, comprando el Class 40 de Yoann Richomme, ganador de la Route du Rhum 2018.
"Había una verdadera dimensión deportiva. Gané experiencia, tuve grandes resultados, podios en casi todas las carreras. Hasta la Transat Jacques Vabre 2019. Me disloqué el hombro después de tres días de carrera. Pero hay que volver a levantarse y seguir adelante" desarrolla William.

Una nueva clase 40, el Clak40 de VPLP
Desde entonces, William ha puesto en marcha un nuevo proyecto con inversores y está iniciando la construcción de un VPLP de clase 40 firmado. Se trata de una primicia para la firma de arquitectura, cuyos dos modelos serán lanzados en breve y estarán presentes en la Transat Jacques Vabre el próximo otoño. William podrá validar su elección navegando a bordo de los barcos hermanos de su Clase40.
"Es un barco hecho a medida, acorde con mis ambiciones. Se construyó pensando en la Route du Rhum 2022, por lo que es de naturaleza transatlántica. Tendré un año para hacerla más fiable participando en todas las carreras de antemano para medirme con los demás y clasificarme. Sabiendo que cada vez hay más barcos y más gente en la Clase 40, espero luchar en primera línea. Tengo la suerte de haber navegado en diferentes barcos en los últimos tres años. Tengo una buena experiencia con estos barcos" explica William.
El Clak40 de VPLP es el primer Class40 de la firma. Es un barco versátil, diseñado para las travesías largas y que cumple con las últimas normas de medición que han visto evolucionar la forma de los barcos.

"Es un barco un poco diferente a los demás. Tiene todas las posibilidades de ganar. Es una apuesta por haber elegido VPLP cuando es su primera Clase40. Es una empresa con buena reputación. Hacen buenos barcos. Después de ver los dibujos, es coherente con lo que pensaba. Va a ser un gran barco. Está redondeado en la parte delantera para obtener la máxima potencia. En la Clase 40 no tenemos foils, así que las narices redondas aportan la potencia extra. Lo que también cambia es el balancín del casco -tiene forma de banana- y las líneas de fuga. El casco es bastante especial comparado con los demás sin ser extremo en su forma como el plan Lombard.
En cuanto hay mar, bajo el spinnaker, el barco cabecea hacia arriba y ya no se planta en la ola. Estos barcos frenan mucho menos y son mucho más tolerantes con el mar. En la Route du Rhum, hay marejadas atlánticas o grandes mares como en el Golfo de Vizcaya durante la primera semana. Está hecha para este tipo de condiciones. Es bueno tanto en ceñida como con poco aire.
En cuanto a las innovaciones técnicas -colocación de la quilla, timones...- no puedo decir mucho sobre ellas por el momento explica William.
Al final, William pudo elegir entre 6 diseñadores diferentes de entre todos los planes propuestos. Pero VPLP supo seducir al joven patrón con la forma del barco, la filosofía que tenían y la versatilidad del Clack40. El barco será construido por el astillero Multiplast, también una primicia en la clase 40, a partir de septiembre de 2021.

Mientras tanto, William se propone reunir un equipo sólido para llevar a cabo su proyecto. Sin barco por el momento -su antiguo Class40 ha sido vendido a Nicolas Jossier, que participará en la Transat Jacques Vabre a bordo-, William tiene la intención de seguir navegando. Pronto anunciará su participación en la Jacques Vabre.
"Por el momento no tenemos patrocinadores del título. Tengo pequeños socios que me acompañan, pero todavía hay que encontrar una parte del presupuesto para completar el proyecto. La idea es tener mi barco en febrero de 2022 y encontrar otros patrocinadores, concluye William.