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Son jóvenes, españoles y están decididos a dejar su huella en el Atlántico. Pep Costa y Pablo Santurde del Arco forman una pareja complementaria a bordo del Class40 VSF Sport. Justo antes de zarpar del puerto de Le Havre para la Transat Jacques Vabre, se tomaron el tiempo de responder a nuestra serie de preguntas... no precisamente técnicas.
Dos personajes bienhumorados y una complicidad que no finge
Desde los primeros intercambios, la complicidad entre ambos es evidente. Pep, de 26 años, dice enseguida: "Pablo es una persona apasionada" Pablo continúa diciendo que se llevan bien, tanto en cubierta como en tierra. Uno controla los barcos, el otro se dedica a descansar. De eso se trata: de entenderse y respetarse, incluso en silencio.
A bordo, un sombrero, una foto de un perro... y algunos rituales propios
Nada de sofisticados gris-gris para estos dos. Pablo se embarca con un gorrito para protegerse del frío. En cuanto a Pep, guarda un fondo de pantalla muy personal: una foto de su perro. ¿Detalles triviales? La verdad es que no. Estos objetos, por discretos que sean, crean un vínculo emocional con tierra firme, sobre todo cuando el mar se vuelve exigente.
Lo que quieren es navegar rápido, pero sin sacrificar el elemento humano
Su ambición es simple y directa: ser competitivos. " Queremos estar delante, sí, pero también queremos tomar ventaja ", dice Pablo. Rendimiento, sin el estrés constante. Con el deseo de volver a casa orgullosos, pero no agotados. Y se nota en la forma en que hablan del mar, de la regata y del placer de navegar.
Equipos en evolución y recuerdos de antaño: entre la tecnología y la nostalgia
Para ellos, la clase 40 ha cambiado, sobre todo con la llegada de los scows, más voluminosos en la parte delantera y más difíciles de navegar. " Tiene una patada ", dicen. Pero los archivos meteorológicos, más legibles gracias a la conexión por satélite, les permiten ser más estratégicos. Y cuando se les pregunta por sus recuerdos del mar, a menudo surgen las puestas de sol, casi como una respuesta automática. " Estando en medio de la nada, es donde sientes el mar. "
Puertos de escala de ensueño, hamburguesas a la llegada y proyectos personales en barco
En tierra, las cosas están más tranquilas. Uno está pensando en una lancha motora para explorar la bahía de Santander. El otro ya navega por el Mediterráneo en un crucero de 14 metros con su familia. Algún día, quizás, tendrán su propio barco, pero de momento, su energía se centra en las regatas. Con, como pequeño lujo al final, una buena hamburguesa o algo de fruta fresca.
Un vídeo que no debe perderse
Echa un vistazo a la entrevista en vídeo en su totalidad. Escuchará anécdotas, risas, recuerdos del Optimist, listas de reproducción llenas de reggaeton e incluso una reflexión sobre la ecología en el mar. Es ligero, humano y espontáneo. Una cita ineludible para los que quieran descubrir a los navegantes de otra manera.
