Reunidos por iniciativa de Bretagne Developpement Innovation, un grupo de expertos en regatas oceánicas, entre los que se encontraban Xavier Guilbaud arquitecto naval de VPLP Design, Antoine Mermod de la clase IMOCA, Olivier Douillard de la empresa de análisis de datos AIM45, Eric Levet marc Lombard y el arquitecto naval Renaud Banuls en el marco del Salón Náutico de París, la Marina francesa y la Armada francesa han intercambiado puntos de vista sobre los aspectos técnicos de la Route du Rhum 2022.
Una emocionante Ruta del Ron
Activos en las diferentes clases, todos los oradores se mostraron satisfechos por el interés deportivo de la carrera. En Ultim, Renaud Banuls subraya: " El juego fue emocionante con barcos que se mantienen a una distancia agradable para ver regatear, que están en la escala de un arrecife o una trasluchada. El nivel es cada vez más estrecho" Xavier Guilbaud está de acuerdo: "Tuvimos una regata realmente voladora durante el 50-60% del tiempo, con un compromiso de los patrones que no esperábamos"

En Ocean Fifty, el arquitecto de VPLP Design subraya el valor probado de los nuevos diseños, integrando la protección de los marinos. "El nivel de compromiso requerido en estos barcos significaba que los trimaranes más protegidos permitían a los patrones mantener mejores promedios"
Por parte de la IMOCA, ésta hace hincapié en la prima de antigüedad. "La Route du Rhum es una carrera de experiencia. Es un sprint. Es lógico que, conociendo bien los reglajes de sus barcos, APIVIA y LinkedOut estén por delante"

La buena regata en Class40, con la extraordinaria remontada de Yoann Richomme, también valida los nuevos monocascos que han salido de los astilleros, como señala el especialista Eric Levet. "Los últimos avances del casco están por delante"
Aumentar los esfuerzos en los barcos
Al repasar las roturas que se han producido en las distintas clases de embarcaciones, los ponentes coinciden en que se ha producido un cambio importante en el nivel de estrés al que están sometidas las embarcaciones. Al contrario que en 2018, los Ultimates no sufrieron ninguna rotura importante en la Ruta del Ron 2022. Todavía se está analizando la rotura de la orza del Banque Populaire 11, pero en los viajes de vuelta se observaron otros daños en los apéndices.

En cuanto a la IMOCA, Antoine Mermod se felicita por el descenso del índice de roturas en una clase que no deja de crecer. "De los 38 barcos de la salida, la tasa de abandono es solo del 11-12%, dividida por 2 en comparación con 2018. Había siete barcos nuevos en la salida y siete en la llegada" En cuanto a las desarboladuras de Bureau Vallée y Apicil, añadió: "Apicil tuvo una colisión que dañó el balancín, lo que provocó la desarboladura. Para Bureau Vallée, está en fase de análisis. El mástil se revisó de nuevo en agosto. Hoy, el mástil es el fusible y es difícil encontrar otro. Al limitar la superficie de la lámina, limitamos el par, lo que nos permite jugar con el coeficiente de seguridad. Pero nuestros barcos duran 20 años y evolucionan, así que intentamos tenerlo en cuenta en las normas. No somos como los coches, que cada año construyen nuevos"

En cuanto a los desprendimientos en la Clase 40, Eric Levet dice que la explicación más probable es una barra esparcidora ligeramente subdimensionada. "El aparejo es quizá un poco ligero dados los grandes esfuerzos dinámicos"
Saber utilizar los datos
Las regatas oceánicas modernas instrumentan cada vez más sus barcos. Pero aunque los sensores son útiles, sobre todo para explicar los daños a posteriori, tienen otras funciones y podrían aprovecharse aún mejor. Olivier Douillard lo explica: "Al principio, los datos se utilizaban sobre todo por rendimiento y velocidad. Hoy sólo es el 20%. El resto se utiliza para seguridad, energía... Pero no lo utilizamos lo suficiente. Nuestra idea es que los equipos sean autónomos en su análisis. Hemos visto que los equipos hacían unos quince análisis en la plataforma por semana durante la temporada y 120 por semana dos meses antes de la Route du Rhum. Esto aún no es rutinario. La accesibilidad es importante. Hoy, el equipo medio de la IMOCA acude a los datos. Tenemos que invertir en personas y procesos. Hasta ahora, nos hemos centrado en aspectos concretos y físicos
Si la recogida sigue siendo escasa en Class40, con unos pocos barcos que equipan sus puntales con sensores de tensión, es masiva en Ultim e IMOCA. "Hay entre 600 y 800 sensores con frecuencias de 1/2 a 50 Hz"
Conocer los barcos de antemano es esencial. Para ello, hay que navegar", afirma Renaud Banuls: "Un Ultim tiene 180.000 puntos de ajuste y, navegando mucho, probamos entre 6.000 y 7.000 de ellos. Por eso necesitamos la simulación"

Para simular y diseñar mejor, y navegar con seguridad, Olivier Douillard aboga por compartir la información. "Los datos de las unidades inerciales sobre los aspectos dinámicos son muy dimensionales. Deben compartirse. Al conocer mejor tu entorno, puedes gestionar mejor las alarmas, que se vuelven menos teóricas y dan menos miedo, porque sabes que no estás en lo desconocido"
A la espera de que se compartan los datos, ¡compartir esta información sigue siendo emocionante!