Una salida de las Islas Canarias
Por cuestiones de viento y corriente, la salida de un transatlántico a remo sólo puede ser desde las Islas Canarias o la costa de África Occidental. Así que fue desde la isla de La Gomera desde donde partió Jazmín.

Con 7 metros de eslora y un desplazamiento de aproximadamente una tonelada, su embarcación cuenta con un puesto de remo central, un camarote trasero y el puesto de proa se utiliza para el abastecimiento de combustible. Su construcción en sándwich lo hace insumergible. Está vigilada por una baliza de seguimiento, y los dos Iridiums de a bordo han permitido a Jasmine mantener vacaciones diarias con su familia y amigos.
Por la fuerza de las armas
Jasmine recorrió una distancia de unos 3.000 kilómetros con la fuerza de sus brazos. Alternó sesiones de remo de dos horas antes de aceptar un turno libre de la misma duración. Con una media de entre 2 y 3 nudos, fue una verdadera prueba de lentitud y resistencia la que emprendió Jasmine.

Un viento alisio moderado no le permitió mantener su objetivo de 60 días y tuvo que racionarse al final de su viaje. La comodidad espartana de su barco no parece haberle causado ningún problema.
Un vuelco dos días antes de la llegada
La aventura estuvo a punto de terminar dos días antes de la llegada, cuando la canoa de Jasmine volcó a 100 millas de la meta. El sistema de enderezamiento funcionó perfectamente, permitiéndole completar su recorrido. Llegó a la isla de Antigua el 20 de febrero de 2021, completando su transat en 70 días, 3 horas y 48 minutos.

Revive el récord que hasta ahora ostentaba la estadounidense Katie Spotz, que hizo el mismo recorrido en 2010 con 22 años. La persona más joven en cruzar el Atlántico a remo sigue siendo Lukas Haitzmann (un hombre), que completó su travesía transatlántica en 2019 con solo 18 años.