Barcos redondos, ¡qué idea! Fue idea del almirante Andrei Alexandrovich Popov en la segunda mitad del siglo XIX. Los acorazados Novgorod y Vicealmirante Popov, así como el yate imperial Livadia, se construyeron siguiendo este principio. ¿Cuál es la carrera de estos barcos insólitos?
Una idea no tan moderna
La tentación del barco circular no se remonta al imperio ruso. De hecho, las plataformas flotantes redondas existen desde la antigüedad para circular por las vías navegables y transportar personas y cargas pesadas. Se pueden encontrar vestigios de ellos en Mesopotamia, a orillas del Éufrates, en la India y en Asia. En Gran Bretaña e Irlanda, los coracles, una especie de barca cesta, seguían utilizándose en los ríos en el siglo XX.
Sin embargo, este tipo de diseño no se utilizaba para los buques destinados a navegar en alta mar.
Un contexto particular
Es posible que la popovka nunca hubiera visto la luz sin un contexto internacional determinado. De hecho, al término de la guerra de Crimea, el Tratado de París, firmado en 1856, declaró la neutralidad del Mar Negro y prohibió la circulación de buques de guerra o la construcción de fortalezas.
Para no dejar Sebastopol sin defensa, el Imperio ruso buscó la manera de eludir las disposiciones del Tratado de París. El almirante Andrei Popov tuvo entonces la idea de un acorazado redondo cuyas características le permitieran estar fuertemente armado con cañones, pero que no figurara en los registros de la flota militar: el Novgorod tomó forma.
Un acorazado redondo y poderosamente armado
En teoría, el diseño circular del buque debía permitirle llevar cañones pesados para la defensa costera y evitar el fenómeno del balanceo para mejorar la precisión del fuego, por ejemplo.
El Novgorod tiene 31 metros de largo y ancho, forma circular y cubierta plana salvo por sus dos chimeneas. Está propulsado por seis máquinas de vapor con una potencia total de 3.000 caballos. Esta potencia le permite avanzar a un máximo de 6 ó 7 nudos.
En cuanto al armamento, cuenta con blindaje pesado, dos cañones de 279 mm, dos cañones de 86 mm y dieciséis cañones de 37 mm.
Malas cualidades de navegación
Sin embargo, el Novgorod y su buque gemelo, el vicealmirante Popov, no mostraron cualidades náuticas interesantes. Por el contrario, fueron calificados como "los peores buques de guerra jamás construidos". Debido a su forma, los cañonazos les hacían girar y retroceder, no permitiendo la precisión de fuego necesaria para un buque de guerra. Además, la cubierta era barrida por las olas cada vez que el mar estaba agitado.
El yate imperial Livadia obtuvo mejores resultados, ya que su forma era romboidal en lugar de redonda, con una eslora de 71 por 46 metros. Sin embargo, en su viaje inaugural, el yate sufrió graves daños relacionados con el diseño.
El daño tenía un doble mecanismo: en primer lugar, al inclinarse el fondo plano sobre las olas, la gravedad ejercía una enorme presión sobre él, doblando toda la estructura hacia abajo. En segundo lugar, al caer hacia atrás, la parte inferior golpeó con fuerza el agua, rompiendo los remaches y arrancando los travesaños. Botado en 1880, el Livadia fue abandonado por la familia imperial en 1883. El Imperio ruso dejó de fabricar barcos redondos.
Sin embargo, la idea sigue viva con el diseño de la casa burbuja imaginada por el arquitecto naval Jean-Michel Ducancelle y clasificada como barcoâeuros¦
