Cada semana le proponemos una pregunta sobre su permiso de navegación. Es una forma estupenda de poner a prueba tus conocimientos o descubrir áreas nuevas e inexploradas. Esta semana, analizamos una pregunta sobre las normas de circulación al navegar.
Amurado a estribor, rey de los mares
En el mar, el refrán dice: "Amurado a estribor, rey de los mares", lo que significa que un yate que navega amurado a estribor se ve favorecido sobre todos los demás barcos -o casi todos, ya que algunos barcos con poca maniobrabilidad se verán a su vez favorecidos-. Se dice que un yate está amurado a estribor cuando el viento sopla a estribor. Este es el caso del yate en el que me encuentro. Navego amurado a estribor, así que soy un privilegiado.
¿Prioridad o privilegio?
Para su información, el RIPAM, que regula la seguridad de los buques, no se refiere a los buques prioritarios, sino a los buques privilegiados. La regla número uno cuando se navega es evitar la colisión. Por tanto, nunca se tiene prioridad.
Estribor contra estribor
Yo navego amurado a estribor, pero si me fijo bien, ¡el barco cuyo rumbo voy a cruzar también está amurado a estribor! ¿Quién debe ir primero?
Cuando dos yates navegan en la misma amura, ya sea a babor o a estribor, es el que está más cerca del viento, es decir, el que navega más de ceñida, el que tiene ventaja. En nuestro caso, es precisamente el yate al que adelanto el que está más cerca del lecho del viento que yo. Al ir más a sotavento, tengo más margen de maniobra para bajarlo o orzarlo y evitar una colisión. Así que tengo que dejarle pasar. La respuesta B es, por tanto, la respuesta correcta a esta pregunta.
