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Crédit Mutuel firma su tercera victoria en la GLOBE40, al término de una etapa marcada por las condiciones extremas de los años 40 del Sur y un nuevo récord de velocidad. Ian Lipinski y Amélie Grassi cruzaron la línea de meta en Sídney el 11 de diciembre de 2025 a las 03h53 UTC tras navegar 5.823 millas desde La Reunión a una velocidad media de 12,3 nudos.
Un duelo de alta intensidad en los mares del sur
La batalla entre el Crédit Mutuel y el Belgium Ocean Racing - Curium marcó el ritmo de principio a fin. Se registraron veintiocho cambios de líder, prueba del nivel de compromiso entre las dos tripulaciones de cabeza. Sólo al final del recorrido, en la aproximación al estrecho de Bass, los franceses lograron abrir una brecha decisiva.
En esta tercera etapa, con un coeficiente de 2, el rendimiento de la tripulación francesa le ha permitido ascender al segundo puesto de la clasificación general provisional. Sin embargo, la tripulación belga sigue liderando la regata.
Una etapa muy exigente en condiciones de prueba
Partiendo de La Reunión el 22 de noviembre de 2025, las ocho tripulaciones se encontraron al principio con condiciones suaves bajo la influencia de la alta Mascareña. Pero a partir de la segunda semana, al entrar en los Cuarenta Rugientes, tuvieron que hacer frente a vientos sostenidos, temperaturas en descenso y mar gruesa. Rápidamente se alcanzó el límite de rumbo fijado en 46° Sur.
Las velocidades se dispararon, con varios días de más de 400 millas para los líderes. El barco Curium llegó a alcanzar los 30,8 nudos de velocidad instantánea. Este régimen agotador también se cobró su primera víctima: Next Generation Boating Around The World, la tripulación alemana, se vio obligada a retirarse tras sufrir importantes daños en la jarcia.
Class40 entra en una nueva era de rendimiento
Con una velocidad media de 12,3 nudos, el Crédit Mutuel ha pulverizado el récord anterior de Ambrogio Beccaria (12,11 nudos en la Transat Jacques Vabre 2013). Esta cifra ilustra la evolución radical de la nueva generación de Class40, con cascos más anchos en la parte delantera ("scow") y un plano vélico optimizado.
Las velocidades que se alcanzan ahora en los mares del sur recuerdan a las de los IMOCA 60. El GLOBE40 está demostrando ser un escaparate técnico para estos monocascos, que navegan ahora a velocidades medias antes reservadas a yates mucho más grandes.
Para los profesionales de las regatas oceánicas, la construcción naval y el equipamiento de a bordo, el GLOBE40 se está convirtiendo en un laboratorio a escala real. Los esfuerzos a los que se ven sometidos cascos, apéndices, velas y aparejos en los mares australes son un valioso indicador para diseñadores, veleros y fabricantes de equipos.
