Primer invitado a visitar a nuestros amigos de Nomad Citizen Sailing. Daniela y Marvin reciben al padre de Marvin durante una semana a bordo. Mientras él está muy contento de estar allí con su hijo, su nuera y su nieta, su mujer siente mucho menos placer al vivir en un barco.
La alegría y el entusiasmo de esta pareja de navegantes es innegable. Le mostrará al abuelo de Tara el placer de estar en el mar y de disfrutar de la naturaleza y la calma que ofrece esta vida, que describen como nómada.
Si el inevitable aperitivo (para celebrar un cumpleaños) tomado en el mar en la cabina forma parte de este placer de vivir en un barco, las alegrías del anclaje también están presentes con, en particular, el baño en aguas claras. Sin embargo, sólo estamos a principios de enero de 2020. E incluso en el sur de España el agua aún no se ha calentado. Si no sabemos la temperatura exacta (¿15°C?), Daniela admitirá entonces que no era posible permanecer en el agua durante mucho tiempo sin un traje de neopreno. El desfile de delfines viene a poner fin a este bonito día.
Este episodio, en el que la tripulación vuelve a navegar, está protagonizado por la camarógrafa Tara, que, a sus casi dos años, sirve de apoyo a la cámara. Una visión cercana al suelo que no deja de sorprender.
