Cuando se trata de devolver la vida a un viejo barco, no faltan las energías, ¡al menos al principio! Esto puede llevar a un exceso de entusiasmo que puede ser perjudicial más adelante. La mayoría de los aficionados al bricolaje tienen referencias del sector de la construcción, y no todas se pueden trasladar al sector náutico, pues de lo contrario se llevarán una gran desilusión. He aquí algunos errores que hay que evitar.
¡Una herramienta demasiado eficaz!
Es normal y deseable eliminar la pintura vieja y descascarillada para hacer un barrido limpio, pero para ello debe utilizarse una herramienta adecuada. La mejor herramienta es una lijadora orbital de calidad con un abrasivo grueso. No utilice una amoladora. Esta herramienta es muy eficaz, pero crea una superficie opaca que requerirá mucho trabajo posterior

Proteger el espacio de trabajo
En aras de eliminar todo lo innecesario, puede resultar tentador cortar todo lo que sobresale, en lugar de perder tiempo desmontándolo. Tenga en cuenta que las partículas metálicas incandescentes que arroja la amoladora marcarán permanentemente la pintura y el gelcoat. Sólo el ácido fosfórico puede eliminar estas manchas de óxido. Procure proteger perfectamente su zona de trabajo si tiene que esmerilar o cortar acero.

Materiales de calidad marina
Pinturas, selladores, tornillos y pernos... los materiales de construcción son más baratos que sus homólogos náuticos y mucho más fáciles de conseguir. Comprar en la tienda de bricolaje local es una falsa economía que podría acabar costándole caro. El acero inoxidable A2 no es de calidad "marina", ni la madera contrachapada "para exteriores", y en cuanto a las pinturas, ¡apreciará que duren poco después de tantas horas de lijado!

Herramientas de calidad "Pro
La herramienta no lo hace todo, pero sí ayuda Asegúrate de equiparte seriamente, incluso si eso significa revender el equipo al final de tu proyecto. El alquiler también puede ser una forma de conseguir equipos profesionales por un presupuesto razonable. Tómate el tiempo necesario para aprender a utilizar estas herramientas, pero también para afilar las que necesitan ser afiladas. La eficacia y el placer son el precio a pagar

Piensa en la seguridad
Las horas pasadas en urgencias no facilitan el trabajo No descuide el equipo de seguridad y el equipo de protección personal. Un andamio rodante es mucho más seguro que una escalera contra un tablón. Del mismo modo, las máscaras, los monos, los guantes y las gafas no son accesorios El polvo y otros humos de los productos marinos rara vez son inofensivos.

No en todas partes a la vez
Animados por el entusiasmo de los primeros días, es fácil caer en la tentación de abordar el trabajo de frente. Aunque no siempre sea técnicamente lógico, al aficionado le conviene trabajar por etapas, por ejemplo renovando un camarote cada vez, en lugar de toda la carpintería del barco. Así se conservarán espacios agradables y se evitará desperdiciar una motivación preciosa.

Cuando compras un barco antiguo, es natural que tengas ideas sobre cómo modernizarlo o adaptarlo a tus necesidades. Si es posible, tómese el tiempo de navegar el barco para comprobar sus planes con la realidad. No cambies nada importante sin pensarlo bien. ¿Quién sabe, el arquitecto puede haber acertado?