¿Qué criterios definen un buen yate de crucero?

© François-Xavier Ricardou

Para poder navegar, un yate debe cumplir varios criterios. Por supuesto, las aptitudes de la tripulación y sus destinos pueden hacer variar los criterios y no estar todos al mismo nivel. Pero en términos generales, un buen yate de crucero debe cumplir al menos estos 6 criterios.

A la hora de elegir un yate de crucero, se tienen en cuenta varios parámetros. Si su jerarquía depende del programa y de la tripulación, podemos enumerar al menos 6 criterios importantes para elegir un barco en el que navegar.

1 - Confort a bordo, habitabilidad, vida a bordo


Un buen yate de crucero debe ser ante todo confortable. Este confort se consigue mediante una habitabilidad con buenos volúmenes, agradablemente luminosos. Los espacios también deben estar bien delimitados, con camarotes lo más aislados posible. Los baños y aseos también deben estar bien situados, para que puedan utilizarse sin molestias. Por último, los dormitorios deben ser cómodos y accesibles, sin que sea necesario darse la vuelta cada noche. También hay que tener en cuenta la altura libre, ya que puede ser una limitación en función del tamaño de la tripulación.

Por último, la cocina y el comedor estarán bien provistos, tanto en lo que respecta a las superficies de trabajo como a la zona de comedor.

2 - Facilidad de uso


A diferencia de un barco de regatas, un yate de crucero debe ser fácil de manejar, a menudo con una tripulación reducida. Este punto es válido en el mar para todas las maniobras a vela con winches bien dimensionados, si es necesario eléctricos, con maniobras de retorno a la bañera para hacerlas seguras. También es importante pensar en la facilidad de las maniobras a motor, cuando un velero vuelve a puerto. Para ello se puede recurrir, por ejemplo, a una hélice de proa. Piense también en la anchura del barco. En efecto, los diseñadores tienden a hacer estas dimensiones demasiado grandes, lo que a menudo se traduce en la adopción de bisafranes, que causan grandes dificultades para maniobrar en puerto, ya que el flujo de la hélice no está directamente sobre el apéndice.

3 - Rendimiento a vela y a motor


Por supuesto, estamos hablando de cruceros. Por tanto, no se trata de fijar un límite de tiempo. Sin embargo, ir rápido de un punto a otro ofrece seguridad a la tripulación y, sobre todo, permite realizar cruceros más lejanos. Si la velocidad es estimulante, las prestaciones para ir de ceñida, por ejemplo, permiten superar un rumbo sin problemas. Echa un vistazo a las prestaciones de la embarcación.

Si es necesario, tenga en cuenta también el rendimiento del motor si navega contra corriente, o para llegar a tiempo al puerto de escala.

4 - Seguridad en el mar y en el fondeo


La seguridad es un elemento esencial para todos los barcos de vela. Para un barco de crucero, empieza por el equipamiento, sea reglamentario o no, ya sea para el barco como el VHF, el AIS, el radar o la baliza..., o para la tripulación, con el PLB, el chaleco salvavidas o el faro... También comprobaremos la protección de la bañera y las cubiertas laterales, para las tripulaciones con niños.

También llevaremos un barco bien adaptado al programa y a las condiciones meteorológicas que se supone que encontraremos en nuestra ruta.

El tiempo de crucero también se pasa a menudo fondeado. Se necesita un barco bien adaptado para ello. Por supuesto, hay que pensar en el equipo de fondeo: ancla eficaz, buena longitud de cadena, molinete adaptado, pero también evitar que el velero se balancee cuando entra el oleaje. Para ello, los multicascos son los más cómodos.

5 - Capacidad de almacenamiento y autonomía


En crucero, es bueno ser autosuficiente. Si las capacidades de almacenamiento, ya sea de agua, energía o incluso alimentos, nos obligan a volver a puerto a menudo, es probable que la limitación pese. Por tanto, debemos optar por un velero que disponga de buenas capacidades de agua dulce, electricidad a través de las instalaciones de recarga adecuadas, y gasóleo en caso necesario. Estas instalaciones serán aún más importantes si el viaje previsto es largo o está lejos de puntos de repostaje.

Otra consideración es la capacidad de almacenamiento del lazareto para guardar comida suficiente para el viaje y el número de tripulantes.

6 - Estética de su yate


Aunque pueda parecer subjetivo, la estética de un velero también es importante para muchos navegantes. A la gente le gusta navegar en un barco bonito Sobre todo cuando su belleza es agradable y atractiva, sin dejar de ser muy funcional.