Barcos de acero: ventajas e inconvenientes de los cascos de acero

Los barcos de acero están en boca de todos. Bernard Moitessier y otros navegantes de la época eligieron este material por diversas razones. También hay un buen número de lanchas que siguen construyéndose en acero. Pero, ¿por qué siguen siendo populares? ¿Cuáles son las ventajas y los inconvenientes de este material?

¿Por qué elegir un barco de acero?

Tras leer un libro de Bernard Moitessier y otros aventureros oceánicos, muchos elegirán un barco de acero. El barco de acero es históricamente la embarcación de viaje que puede enfrentarse a todas las condiciones, sobre todo en latitudes extremas. Elegir un barco de acero en el siglo XXI también puede ser una garantía de seguridad en caso de colisión con un ovni. Pero, ¿cuáles son las verdaderas ventajas e inconvenientes de estos cascos?

Une réparation dans le bordé
Una reparación en el entarimado

Las ventajas de los barcos de acero

Solidez sin concesiones: una embarcación de acero bien construida puede soportar todas las condiciones meteorológicas, incluidas posibles colisiones. A menudo saldrá con algunas abolladuras, pero debe seguir siendo estanco.

Durabilidad: el acero bien tratado es un material que perdura en el tiempo. Casi todos los grandes buques (transbordadores, portacontenedores, mercantes, etc.) son de acero, y muchos tienen más de 50 años. Además, el acero se recicla muy fácilmente.

Reparaciones baratas y "fáciles": si hay daños, o incluso agujeros, los barcos de acero se pueden reparar fácilmente. Todo lo que hay que hacer es cortar y volver a soldar, y un buen calderero podrá hacerlo por ti. Y si eres bueno con la pistola de soldar, también puedes hacerlo tú mismo.

Une pièce prête à souder
Una pieza lista para soldar

Es fácil de manipular: ¿necesitas añadir una plataforma a tu barco? Considere la posibilidad de soldarla. Procura que sea elegante y estilizada

Coste: puedes encontrar buenas ofertas y barcos baratos. Sin embargo, esta ventaja puede convertirse rápidamente en una desventaja si el barco está en mal estado. Un barco de acero en mal estado puede requerir mucho trabajo, y tendrás que estar preparado para pasar unos meses o años en el astillero antes de poder pensar siquiera en navegar.

Pouvoir accéder partout !
Acceso en todas partes

Las desventajas de los barcos de acero

Fuerte, pero pesado: el acero es mucho más pesado que otros materiales. Por ejemplo, un barco de 9 metros puede pesar 7 toneladas, mientras que el mismo barco hecho de fibra no pesará más de 4 toneladas. Esto significa un desplazamiento pesado y una forma diferente de navegar. El resto del barco tendrá que dimensionarse en consecuencia: velas, jarcias, cabos, etc.

Corrosión: es el mayor inconveniente. Un barco de acero se oxida tarde o temprano. Como el mar es un medio agresivo, hay que vigilar de cerca las embarcaciones. Hay que ser capaz de desmontar cada rincón del barco para asegurarse de que no hay óxido. En general, el exterior de la embarcación está bien protegido por la pintura y no es ahí donde aparecen los problemas, o al menos permanecen claramente visibles. La corrosión suele empezar en el interior, donde es difícil llegar: debajo del fregadero, en la ducha, en el fondo del cofre del ancla, etc. Si va a comprar un velero de acero, asegúrese de poder explorarlo todo.

Aislamiento: aislar correctamente el recipiente de acero es esencial, tanto para el calor como para el frío. Pero el aislamiento debe ser "desmontable", para poder acceder a todas las piezas y comprobar si están oxidadas.

Electrólisis: más rara que en los barcos de aluminio, la electrólisis también existe en los barcos de acero. Para evitar que tu barco se convierta en una batería, deberás vigilar el estado de los ánodos y cambiarlos cuando llegue el momento. También tendrás que tener cuidado con la instalación eléctrica para asegurarte de que no haya fugas en el barco. Por último, deberás tener cuidado de no entrar en contacto directo con ningún metal que coloques en tu embarcación, por ejemplo, una cornamusa de aluminio o un pasacascos de bronce (en este caso, prefiere un pasacascos de plástico).

¿Acero o no?

En última instancia, los barcos de acero bien tratado ofrecen todo lo que cabe esperar de un crucero de aguas azules: durabilidad y robustez. Pero todos los materiales tienen sus inconvenientes, y tendrás que aceptar que serán más pesados y menos eficientes, que tendrás que ser meticuloso con el óxido y la electrólisis, y que tendrás que dedicar unas cuantas horas a tratar y pintar cualquier signo de corrosión. Si crees que puedes superar estos inconvenientes, quizá tengas la oportunidad de soldar eslabones de acero con el mar.

Más artículos sobre el tema