Los maelstroms, a menudo rodeados de antiguas leyendas, siguen cautivando a navegantes y curiosos. Estos poderosos remolinos, nacidos de complejas corrientes oceánicas y particulares configuraciones geográficas, pueden poner a prueba incluso a los navegantes más experimentados. Su fuerza los ha convertido en símbolos del poder del mar. He aquí 6 de los torbellinos más famosos del mundo y lo que los hace especiales.
1. Saltstraumen (Noruega)
Saltstraumen, cerca de Bodø, está reconocido como el torbellino más poderoso del mundo. Este fenómeno se forma en un estrecho paso de 150 metros entre dos fiordos por el que fluyen volúmenes impresionantes de agua cada 6 horas (hasta 400 millones de metros cúbicos). Estas masas de agua crean corrientes con velocidades de hasta 21 nudos, generando remolinos de 10 metros de diámetro. La singular geografía del lugar, combinada con las variaciones de las mareas, lo convierten en un destino popular para pescadores y curiosos. Sin embargo, estas condiciones representan un peligro para los navegantes desprevenidos.


2. Old Sow (Estados Unidos/Canadá)
El Old Sow, situado entre Deer Island (Nuevo Brunswick, Canadá) y Eastport (Maine, EE UU), se describe como el mayor remolino natural del hemisferio occidental. Se forma en el paso occidental de la bahía de Passamaquoddy, donde las impresionantes mareas de la bahía de Fundy se precipitan a través de un estrecho paso. La compleja topografía submarina de zanjas y montículos amplifica este fenómeno. Con un diámetro de hasta 76 metros, el Old Sow aparece principalmente durante las mareas más altas, sobre todo cuando las acompañan fuertes vientos. El vórtice está rodeado de varios vórtices más pequeños conocidos como "lechones". Estos vórtices son visibles unas horas antes de la pleamar y pueden observarse desde tierra o en barco.
Aunque técnicamente se clasifica como vorágine por su relación con las mareas y su tamaño, su comportamiento también es similar al de un rápido en algunos casos. Los navegantes pueden atravesarlo con cuidado utilizando embarcaciones capitaneadas por patrones experimentados, lo que ha llevado incluso a la creación de una "Asociación de Supervivientes de la Vieja Cerda" para recompensar a quienes consiguen cruzar esta tumultuosa zona.


3. Moskstraumen (Noruega)
Moskstraumen, uno de los torbellinos más potentes conocidos, se encuentra frente a las islas Lofoten, en Noruega. A diferencia de otros torbellinos, que suelen situarse en estrechos, el Moskstraumen se forma en mar abierto. Este fenómeno es el resultado del encuentro de las aguas frías y saladas del Atlántico Norte con las corrientes más cálidas del Golfo de Noruega. Esta interacción de masas de agua crea impresionantes remolinos que, aunque espectaculares, no son tan potentes como otros maelstroms.
El fenómeno también se ve influido por una serie de factores geográficos y marinos. En particular, las fuertes mareas semidiurnas desempeñan un papel vital, amplificando la intensidad de las corrientes. Otro factor clave es la forma particular del fondo marino.
La corriente de Moskstraumen se forma a unos 500 metros de profundidad, antes de encontrarse con una cresta poco profunda, de entre 20 y 60 metros, situada alrededor de las islas de Moskenesøya, Mosken y Værøy. Esta cresta hace que el agua suba y se arremoline alrededor de los bordes de las islas. Este fenómeno geográfico, combinado con el efecto de las mareas, intensifica las corrientes y crea impresionantes vórtices. Las corrientes, de unos 8 kilómetros de ancho, alcanzan su máxima intensidad en julio y agosto. Su velocidad oscila entre 5 y 10 nudos.
Aunque el aspecto dramático de este fenómeno ha sido muy amplificado por relatos literarios como el de Edgar Allan Poe en Un descenso a la vorágine sin embargo, sigue siendo especialmente arriesgado para los navegantes inexpertos. Debido a su imprevisibilidad y al hecho de que se forma en mar abierto, es crucial conocer los horarios de las mareas y estar debidamente preparado para navegar en estas aguas.


4. Corryvreckan (Escocia)
Corryvreckan es un impresionante remolino situado entre las islas escocesas de Jura y Scarba, en el estrecho de Corryvreckan. La formación de estos remolinos se debe a la presencia, en el centro del estrecho, de un pilar de basalto de 170 metros de altura que forma un banco a 29 metros por debajo del nivel del agua, conocido localmente como "The Old Hag". Durante las mareas vivas, las corrientes pueden alcanzar los 8 nudos, generando olas de hasta 5 a 8 metros. Las cambiantes condiciones meteorológicas y la fuerza del agua hacen que esta zona sea especialmente peligrosa para los navegantes desprevenidos.

5. Los torbellinos de Naruto (Japón)
Los remolinos de Naruto se encuentran en el estrecho de Naruto, que une las islas de Shikoku y Awaji. Se forman cuando las mareas del Mar Interior de Seto atraviesan este estrecho, donde las corrientes alcanzan velocidades de unos 10 nudos. Los vórtices pueden alcanzar los 20 metros de diámetro, lo que convierte a Naruto en uno de los remolinos más impresionantes del mundo. Estos remolinos inspiraron el nombre del pez surimi narutomaki que a su vez inspiró el nombre Naruto Uzumaki del manga y el anime Naruto, " Uzumaki " que significa "espiral .



6. Garofalo (Italia)
El Garofalo, situado en el estrecho de Mesina, entre Sicilia y la península italiana, es un fenómeno natural ligado a las poderosas corrientes de marea que fluyen por esta estrecha vía navegable. Aunque a menudo se le denomina remolino, no alcanza la magnitud de los más famosos maelstroms debido a su tamaño e intensidad relativamente menores, con corrientes de hasta 5-6 nudos. Sin embargo, este fenómeno natural ha adquirido notoriedad histórica y mitológica por estar vinculado a dos de los monstruos marinos más famosos de la mitología griega: Escila y Caribdis. Se cree que estas criaturas mitológicas, representadas como un abismo marino y un monstruo de múltiples cabezas, viven en el estrecho de Mesina, donde hacían peligrosa la navegación para los antiguos marineros. Aunque la mitología ha exagerado la naturaleza de estos remolinos, el Garofalo sigue siendo objeto de fascinación tanto para los marineros como para los historiadores.

Los maelstroms, dondequiera que se encuentren en el mundo, encarnan el poder de las fuerzas marítimas. Estos fenómenos merecen ser respetados, observados y aprehendidos con una vigilancia constante.