"Me construí un runabout de la vieja escuela por 4.000 euros"

Jean-François, o Jeff, es un autodidacta. Le gusta plantearse retos y encontrar soluciones. Manuel, decidió construir un runabout para disfrutar en los ríos y lagos cercanos a su casa, en el Loira.

Jeff no sabe mucho de barcos. Pero construir uno él mismo no le asusta. Así que encontró en Internet planos gratuitos de un pequeño runabout de 4,30 metros. Y se puso manos a la obra.

Planes sucintos

Des plans approximatifs, mais gratuits
Planos toscos pero gratuitos
Conversions des mesures impériales
Conversiones de medidas imperiales

Los planos datan de los años 60 y proceden de una revista inglesa, con instrucciones de uso muy breves. La primera dificultad fue convertir todos los datos imperiales en métricos. A continuación, Jeff hizo imprimir el plano en gran formato para poder dibujar las parejas. A pesar de la mala calidad y la inexactitud de los planos, trasladó los ángulos midiéndolos simplemente con un transportador. Los últimos ajustes los hizo a ojo.

Construcción tradicional

Dessins et découpes des couples
Dibujar y cortar las parejas
Une construction traditionnelle sur lisse, au milieu l'étuve artisanale
Un edificio al revés. En el centro, el horno casero

Este pequeño runabout está construido al revés sobre un armazón de madera. Con escasos conocimientos de construcción naval, Jeff combinó varios métodos de montaje para su embarcación. La estructura de pino está encolada con cola PU. Los tablones de contrachapado marino se atornillaron con tornillos de acero inoxidable, pero también se pegaron con cola de poliuretano. A continuación, todo el conjunto se lamina con fibra de vidrio y resina epoxi. El conjunto se completa con juntas pegadas con epoxi. El montaje es un poco irregular, pero tiene la ventaja de ser sólido.

Al horno

Las formas de este barco no plantean demasiados problemas, salvo en la proa. Aquí es donde hay que doblar las bordas en 3 dimensiones. Tras romper dos de ellas, Jeff decidió vaporizarlas. Utilizando un vaporizador eléctrico que encerró bajo una lona, hizo un vapor en el que dejó las tablas durante 45 minutos. Luego las presentó en el barco, colocándolas con prensas y correas. Por la mañana, la madera ha tomado forma y se puede encolar.

Tablero contrachapado marino de 10 mm

El casco es de contrachapado marino. Jeff no tiene plantilla, así que presenta estas placas de 10 mm directamente sobre el casco, traza los recortes aproximados y luego los ajusta con una lijadora de banda. A continuación, las placas se atornillan con tornillos de acero inoxidable. Para este barco se utilizarán nada menos que 900 tornillos Finalmente, el casco se cubre con un laminado epoxi en el exterior, que oculta los tornillos. Una capa de epoxi en el interior completa el casco.

Découpe du tableau de bord
Recorte del salpicadero

Es a la hora del acabado cuando Jeff se tira de los pelos, porque lijar epoxi es complicado. Utiliza muchos discos de lija, pero el resultado no es lo suficientemente bueno para su gusto.

Construcción rápida en 5 meses

Retournement de la coque avec 3 amis
Volcar el casco con 3 amigos

Para esta construcción, Jeff utilizó su garaje de 6 metros de largo. El barco se dio la vuelta fuera, con la ayuda de 3 amigos. Jeff trabaja rápido, muy rápido. La construcción le llevó 5 meses, trabajando por las noches y los fines de semana. Pero admite que durante este periodo nunca se fue a la cama antes de las 2 de la madrugada. De hecho, su mujer se lo dijo muy amablemente una vez terminado el barco: "No me he aprovechado mucho de ti en los últimos cinco meses..."

Un volante y 4 asientos

Jeff ha hecho algunos cambios en la distribución. Originalmente, la embarcación estaba propulsada por un fueraborda de caña. Jeff decidió instalar un timón, con 4 asientos orientados hacia la carretera. Así que modificó los asientos e hizo los cojines él mismo, tomando prestada la máquina de coser de un vecino.

Un presupuesto limitado

Un hors-bord pour 250 €
Una lancha rápida por 250 euros

En términos de presupuesto, la lancha costó 4.000 euros. Para el motor, Jeff buscaba un fueraborda de aspecto retro que encajara con la forma de su barco. Por 250 euros, encontró un Evinrude de 1968, con un motor de 4 cilindros y 2 tiempos que desarrollaba 60 CV. Guardado bajo una lona, el motor no estaba bloqueado. Con un amigo, reconstruyó el circuito eléctrico, lo limpió y engrasó, ¡y el motor estaba listo para volver a funcionar!

Ningún problema con la homologación

Navigations en plan d'eau intérieur
Navegación en aguas interiores

Este motor no tiene trimado, y el barco, con su depósito de 70 litros bajo la cubierta de proa, tiene un poco de morro en el agua. Jeff ha añadido unas aletas para facilitar el planeo. Aparte del ruido y el consumo de combustible, y de la contaminación, Jeff está muy contento con su construcción. Puede navegar una familia de cuatro miembros, aunque el barco está homologado para seis. Desde el punto de vista administrativo, no tuvo ningún problema para obtener la homologación como embarcación de aficionado. Todo lo que tuvo que hacer fue preparar un expediente, enviar los planos, las facturas de los materiales y fotos de la construcción. La única limitación era que no podía venderlo durante los 5 primeros años.

Navegar por placer

Ahora navega regularmente por el Saona y un embalse del Loira. Pero ya están tomando forma otros proyectos para este aficionado dotado por naturaleza para las manos.

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