¿Qué es una hélice contrarrotatoria?
En una lancha motora convencional, la propulsión suele estar a cargo de una hélice. Cada motor está equipado con una hélice sobre un eje o base. Pero los navegantes observadores y curiosos se habrán dado cuenta de que algunos barcos tienen dos hélices montadas una detrás de la otra en un solo motor. Son las llamadas hélices contrarrotantes. Coaxiales, son impulsadas por el mismo motor, pero en direcciones opuestas, con un paso a la izquierda y el otro a la derecha. Para transmitir la potencia del motor a las dos hélices se utiliza un sistema mecánico de dos ejes concéntricos.

Ventajas e inconvenientes de la doble hélice en un barco
El uso de hélices contrarrotatorias presenta varias ventajas técnicas:
- Eliminación del efecto de paso de la hélice : Los navegantes suelen ser conscientes del efecto de cabeceo por las dificultades que provoca al maniobrar, sobre todo al dar marcha atrás. Esto se debe a que el flujo creado por la rotación de la hélice, y el empuje que genera, no están perfectamente alineados con el eje de la línea del eje. Una ligera componente hace que la embarcación gire, y puede crear una ligera escora. Con una segunda hélice que gire en sentido contrario, el flujo se endereza, lo que permite que el empuje esté perfectamente alineado con el eje, con las consiguientes ventajas para mantener el rumbo y maniobrar con precisión.

- Rendimiento superior : Al utilizar la segunda hélice para recuperar la energía dispersada por la primera para hacer girar el flujo, se limitan las pérdidas hidrodinámicas, aumentando así la eficiencia del sistema global de motor-propulsión.
- Limitación del diámetro de la hélice : Al utilizar dos hélices, la superficie de transmisión de las fuerzas hidrodinámicas es mayor. Para transmitir la misma potencia, es posible reducir el diámetro de la hélice, pero también limitar la presión sobre las palas y el riesgo de cavitación a alta velocidad. Así pues, los diseñadores pueden imaginar embarcaciones rápidas con poco calado.
Por supuesto, la solución no está exenta de repercusiones negativas. Visite complejidad mecánica significa mayor peso y transmisiones más frágiles. Como resultado, la embarcación requiere más mantenimiento y es algo menos fiable. El sitio coste de los sistemas contrarrotatorios es generalmente superior, aunque las hélices más pequeñas son más fáciles de fabricar que los propulsores de gran diámetro.
Aplicaciones de la hélice contrarrotatoria
Aunque las hélices contrarrotantes se utilizan en la aviación desde principios del siglo XX, sus aplicaciones marinas comenzaron con los torpedos, cuya gran velocidad y necesidad de estabilidad hacían que la tecnología fuera muy pertinente para limitar el ruido de cavitación y mantener el rumbo.

En el sector de la náutica, Volvo Penta ha contribuido en gran medida a la popularización de la tecnología DuoProp en sus motores de propulsión en popa, que permite suministrar una gran potencia con un tamaño de hélice limitado. Los competidores de Mercruiser también ofrecen esta tecnología. El principio también puede encontrarse en los IPS de Volvo.

En la actualidad, los motores fueraborda de alta potencia de las principales marcas suelen estar equipados con hélices dobles contrarrotantes. Suzuki y Mercury son dos ejemplos.