Una visita muy esperada

En el pantalán del Grand Pavois, el Pogo RC no pasa desapercibido con su cubierta roja. Su silueta, reconocible al instante, rompe con las líneas más estilizadas de los cruceros del astillero.
La amplia proa en forma de espátula, el escorzo invertido y el bajo francobordo en popa atestiguan la búsqueda de la eficiencia hidrodinámica, mientras que la alta pata de proa delata un vínculo con los modernos cascos de semicuna.

Bajo su estética deliberada, el Pogo RC revela una construcción muy rigurosa: casco infundido, estructura de carbono, ensamblaje optimizado al gramo. El astillero, famoso por sus Mini 6.50 y Class40, traslada sus conocimientos a un nuevo programa: las regatas IRC con tripulación completa o con tripulación reducida.

Un carène signé Manuard âeuros Nivelt
Para este modelo, Christian Bouroullec y su equipo decidieron confiar el diseño a Sam Manuard y Bernard Nivelt, dos arquitectos cuyas creaciones dominan las líneas de salida en las regatas IRC y oceánicas.

El resultado es un casco planeador, potente en los puntos de viento a favor, pero capaz de un rendimiento regular en ceñida gracias a un plano vélico equilibrado y a una especial atención al centrado del peso.
Con 3 toneladas en la báscula, un mástil de carbono y dos timones retráctiles, el RC presume de una relación peso/potencia típica de los barcos diseñados para largas regatas oceánicas como la Transquadra o la Cap Martinique.

Un puente diseñado para el rendimiento

A bordo, la bañera marca inmediatamente la pauta. Amplia y despejada, alberga todos los accesorios necesarios para el rendimiento: un timón de escota de mayor a todo lo ancho, un gran número de winches, bloques textiles, estribos basculantes y amplios cofres de bauprés listos para engullir las maniobras.

Todo el barco destila espíritu de regata y precisión. La disposición de la cubierta, elaborada en colaboración con los regatistas, favorece la circulación fluida y el trimado rápido. Los tanques de lastre laterales y de popa atestiguan la voluntad del barco de rendir tan bien con tripulación completa como a dos.

Volúmenes interiores técnicos pero coherentes

En el interior, el ambiente es fiel a la filosofía del astillero: sencillo pero funcional. El simétrico salón central alberga dos asientos de vigilancia enfrentados, con un puesto de navegación articulado sobre la esponja.

Los tanques de lastre están discretamente integrados en el suelo y el mobiliario es minimalista, lo que aligera el barco sin comprometer su solidez.
En la proa, un pequeño espacio alberga un inodoro marino y un lavabo; en la popa, dos literas individuales para la guardia. La altura libre es de unos 1,90 metros en la escalera.

La cocina, reducida a lo esencial, consta de un fregadero con bomba de pie y un hornillo sobre un cardán.
El diseño es sencillo pero equilibrado, con todos los detalles pensados para centrar el peso y garantizar una navegación eficiente.

Un ADN de carreras confirmado
Diseñado para cumplir las reglas del IRC, el Pogo RC no tiene nada que ver con el espíritu del astillero. Se dirige claramente a un público bien informado: regatistas experimentados que disfrutan con las travesías largas y rápidas y las regatas mixtas. La presencia del RC en el Grand Pavois suscitó un gran interés entre los visitantes, especialmente entre los propietarios de Mini y Class40 que buscaban una embarcación más polivalente.
Con el Pogo RC, Pogo Structures da un paso firme hacia la competición IRC, sin abandonar su experiencia histórica en la construcción ligera de alto rendimiento. Bajo la apariencia de un prototipo civilizado, este yate refleja a la perfección la continuidad de una filosofía: la de un astillero donde el rendimiento sigue siendo una herramienta de ingeniería antes que una postura.