Una cáscara rugosa que se adapta al uso
Diseñado para adaptarse a las necesidades del usuario, el Reverse 6.60 es un casco abierto inicialmente vacío. La amplia cubierta puede equiparse con taquillas, asientos y accesorios para adaptarse a las necesidades del usuario. Un sólido baluarte y una barandilla hacen que la cabina sea muy segura para la tripulación. Sébastien Sibiril, el arquitecto y el astillero han previsto diferentes configuraciones de asientos o cajas de almacenamiento según los usos. El astillero Amares entrega el casco y toda la calderería al navegante, que puede entonces decidir equiparlo como desee.
Cómodo acceso trasero
El motor fueraborda y su canal de elevación ocupan el centro del espejo de popa, pero dos faldones laterales facilitan el acceso al agua.

En el caso de la embarcación probada, el propietario, al tener un lugar en el amarre y utilizar su barco principalmente para la pesca, decidió cerrar la circulación de estribor para añadir armarios. No obstante, una escalera de baño permite acceder al agua.

Una caja de almacenamiento grande opcional cerca de un estante proporciona almacenamiento para las cañas de pescar.

Una consola sobria y eficaz
La consola central y el asiento permiten dirigir cómodamente la Reverse 6.60. Protegido por un parabrisas, el timonel tiene acceso a todos los equipos electrónicos y controles necesarios.

El almacenamiento en el asiento y en la consola permite resguardar objetos. Un espacio en el suelo, accesible en la parte posterior del asiento, será útil para guardar el equipo, con una pequeña red para bloquearlo cuando el barco acelere.


Una generosa cubierta frontal
El espacio delante de la consola está bien dimensionado. Un baúl situado en la parte delantera de la consola alberga el depósito de combustible de 100 litros para el motor fueraborda.

También ofrece asientos suficientes para dos adultos. Como opción, el astillero también ofrece instalar un asiento corrido enfrente, formando con una mesa una agradable bañera delantera.
Accesorios funcionales
El barco cuenta con todos los elementos básicos que se esperan de este tipo de embarcaciones, con un énfasis en la funcionalidad y la simplicidad. Las cornamusas están soldadas a la amurada en la parte delantera y trasera de la embarcación.

Un cofre de anclaje, lo suficientemente grande para el ancla de un barco de 6,60 metros, combinado con un pescante y una bita en el eje, le permitirá pasar algún tiempo fondeado, con total seguridad.
