Daniela, Marvin y su nieta Tara siguen descubriendo los alrededores de La Rochelle, donde los amigos se han unido a ellos para pasar las vacaciones. Después de explorar la ciudad en el episodio anterior.. Nos acompañan en una visita al famoso Fuerte Boyard, situado cerca de la isla de Aix, que fue una prisión y ahora es el escenario de un famoso programa de televisión.
A continuación, diríjase a la isla de Aix, un pequeño islote de 129 hectáreas por el que sólo se puede circular a pie, en bicicleta o en coche de caballos. Una isla tranquila y muy natural que les recuerda la paz y la tranquilidad que sienten cuando viven a bordo de su velero.
Es en bicicleta donde disfrutan descubriendo los placeres de esta tranquila isla: visitando fortalezas, paseando por la costa y degustando ostras.
Pero todo lo bueno se acaba, y sus amigos deben regresar a La Rochelle cuando sus vacaciones llegan a su fin. Este regreso a los pantalanes será la ocasión de una velada de convivencia con los vecinos, degustando ron en la cabina.
Al día siguiente, es hora de volver a poner en orden su vida cotidiana: gran limpieza y, sobre todo, reanudar el deporte para Daniela y Marvin, mientras que Tara ha creado un pequeño parque infantil en los pontones, transformando un cubo en una piscina.
