Befoil 16 Sport: Una versión más ligera en infusión
La segunda generación de catamaranes Befoil, el Befoil 16 Sport esto responde a la voluntad declarada por el fabricante de ofrecer una embarcación que haga accesible el vuelo al mayor número de personas posible. Pero desde el lanzamiento de su primer modelo, diseñado principalmente para los clubes de vela, el astillero de Lorient ha revisado su diseño para hacer su barco más ligero y eficiente. Mientras que el Befoil 16 tenía cascos de polietileno rotomoldeado, en colaboración con el astillero Erplast, el nuevo Befoil 16 Sport tiene flotadores de fibra de vidrio y resina de viniléster, producidos en infusión por el astillero español Mestral Marine Works (MMW), reconocido por la construcción de yates de regata y de crucero. El catamarán de 16 pies se ha adelgazado de 230 kg a 175 kg. Esta ganancia de casi un 25% es crucial para un despegue temprano del barco.
Aunque el astillero ha optado por abandonar el moldeo rotacional por razones de peso, prefiere construir los cascos en fibra de vidrio en lugar de carbono. Esto mantiene el precio bajo mientras que mantiene el barco menos sensible a los golpes. Por lo tanto, puede ser mantenido por un navegante privado o un club de vela sin preocuparse por el mantenimiento y la protección excesivos.
Apéndices de aluminio optimizados
Un elemento clave en el programa de barcos voladores del Befoil 16 Sport es la elección de los apéndices. Al igual que en su primer barco, el constructor decidió mantener los foils y los timones de aluminio. La menor sensibilidad del metal a los golpes y a la abrasión le confiere una mayor durabilidad que el carbono para su uso por un aficionado, especialmente en la playa. No obstante, se mecanizan piezas de titanio para la unión de los perfiles de lámina vertical y horizontal. Existe una versión de carbono de los apéndices como opción.
Seguimos pensando en optimizar los perfiles y el peso de los apéndices, algo importante para un catamarán de 16 pies. "Hoy en día tenemos tres matrices de aluminio especialmente diseñadas para el barco, una para las partes verticales, otra para la parte fija del plano de apoyo de la lámina y otra para los flaps. Estamos trabajando en un nuevo troquel para los timones", explica Charles de Lisle, director técnico. Todos los desarrollos pueden adaptarse a las embarcaciones existentes.
Fácil almacenamiento y montaje
También se ha utilizado el aluminio en otras zonas del barco. La jarcia también está formada por un mástil y una botavara de aluminio. Sólo el bauprés, que no tiene martingala, es de carbono para soportar el esfuerzo del gennaker. Las vigas, todavía de aluminio, están atornilladas. "Nos impusimos la obligación de poder desmontar y volver a montar el barco rápidamente. No hay pegado. Por eso el trampolín no está fijado al casco", explica Charles de Lisle. Una vez desmontados, los cascos pueden almacenarse fácilmente para su invernada o transporte. Un argumento atractivo para los clubes de vela y los particulares.
Si el taller de Befoil en Lorient sigue siendo una operación a pequeña escala y sigue utilizándose para el desarrollo, la calidad del acabado de los barcos es buena. Utilizando proveedores reconocidos, los catamaranes parecen listos para la aceleración de la producción con el lanzamiento de la serie.