La botadura anunciada del EO3 marca un punto de inflexión en el programa Energy Observer. Este catamarán de 30 metros, cuya entrada en servicio está prevista para 2027, transporta una novedosa cadena energética basada en el amoníaco. Diseñado para viajes oceánicos, el EO3 pretende validar en el mar el rendimiento real de esta solución, que aún no se ha probado a bordo de buques comerciales.
Exploración de la integración operativa del amoníaco
La propulsión del EO3 se basa en un sistema híbrido que combina energía solar (180 m² de paneles), propulsión a vela (cuatro Oceanwings), baterías de iones de litio (248 kWh) y una cadena de hidrógeno a base de amoníaco. Hasta 7,5 toneladas de amoníaco se almacenan a bordo y se convierten en hidrógeno mediante un craqueador para alimentar dos pilas de combustible (PEM 70 kW y SOFC 15 kW). El EO3 también cuenta con un motor NH? de combustión directa con postratamiento de NOx.

Esta configuración permitirá evaluar, en condiciones reales, las diferencias de rendimiento, comportamiento y seguridad entre los métodos de conversión directa e indirecta del amoníaco. El proyecto también incluye un componente normativo, en colaboración con las sociedades de clasificación para documentar los protocolos de seguridad y funcionamiento.
Características técnicas de un catamarán de investigación
El EO3 tiene 30 metros de eslora, 12 metros de manga y un calado de 2,10 metros. Tiene un desplazamiento de 125 toneladas y una velocidad objetivo de 8 nudos. El buque está diseñado para una tripulación de seis personas y puede acoger hasta doce pasajeros cuando está navegando. Esto lo convierte en un buque versátil, adecuado para científicos, ingenieros y comunicadores.

Diseñada por VPLP design en co-diseño con Félix Godard, EO3 adopta un enfoque modular que favorece la integración de dispositivos experimentales y recursos de producción audiovisual.
Un programa de pruebas de nueve años
La expedición "En busca de la neutralidad en carbono" (2025-2033) se dividirá en siete misiones temáticas, repartidas por zonas geográficas y retos climáticos. La EO3 tomará el relevo de la EO1 a partir de 2027, con el objetivo de comparar diferentes tecnologías con la realidad marítima.

Cada misión dará lugar a publicaciones para el gran público (documentales, libros, contenidos en línea), así como a la recopilación de datos técnicos para los responsables de la toma de decisiones industriales y normativas. La tripulación incluirá científicos de una amplia gama de disciplinas, lo que permitirá un análisis sistémico de las soluciones a bordo.
NH? cuestiones de seguridad y aceptabilidad
A pesar de sus ventajas energéticas y logísticas (densidad, almacenamiento a -33°C), el amoníaco sigue siendo un compuesto químico tóxico. Por ello, la EO3 pretende probar dispositivos de seguridad a bordo: detección de fugas, gestión del deslizamiento del amoníaco, reducción catalítica de NOx. El objetivo es contribuir a las futuras normas internacionales sobre combustibles alternativos.

EO3 también se está utilizando como demostrador previo a proyectos industriales a mayor escala. EO Concept, una oficina de diseño afiliada a Energy Observer, trabaja paralelamente en EO2, un carguero de hidrógeno de 160 metros que ya ha sido seleccionado por el Fondo de Innovación de la Unión Europea.
Un ecosistema de asociación estructurante
Varias empresas e instituciones apoyan el programa, entre ellas Toyota, Qair, Groupe Delanchy, Chart Industries, Natixis y Crédit Maritime. Además de su contribución financiera, estos socios participan en las pruebas, el contenido y la difusión de los resultados.

Esta red, formada por más de 50 organizaciones públicas y privadas, contribuye a anclar el Observatorio de la Energía en una lógica de cooperación técnica y científica. Es una auténtica palanca para acelerar la experimentación de soluciones a escala piloto.