Un trimarán volcado por el huracán Beryl
Para esta pareja que vive en la costa sur de Inglaterra, cerca de Portsmouth, todo empezó cuando construyeron su propio trimarán hidroala en el jardín, durante el primer encierro, como explica Molly:
"Este pequeño multicasco de carbono es capaz de alcanzar los 20 nudos, pero sigue estando pensado para un uso familiar. Jake ya había construido un Mini en su jardín trasero en 2010
Después de habernos divertido tanto en este pequeño trimarán, decidimos buscar un barco más grande para poder navegar por el Caribe con nuestros hijos.
Entonces nuestra búsqueda dio un nuevo giro con la temporada de huracanes. Los padres de Jake viven en Carriacou, en las Granadinas, que fue azotada por el huracán Beryl. El huracán causó graves daños en muchas de las islas. Entonces, unos observadores de huracanes estadounidenses publicaron imágenes de drones en YouTube.
" Y Jake se topó con un vídeo que mostraba la bahía de Carriacou, con un trimarán de 38 pies volcado en la playa. Localizó al propietario e inició una negociación que duró casi tres meses. Finalmente, el antiguo propietario accedió a vendérnoslo. Una vez cerrado el trato, sin haber visto el barco, Jake voló de vuelta a Carriacou"
Sailing Scout, el último trimarán diseñado por Walter Green
El Scout 38 es el último trimarán construido íntegramente por Walter Green, fallecido en 2024. Fiel a su filosofía, Green imaginó este trimarán como una evolución del A Capella, el más famoso de los cuales ganó la primera Route du Rhum con Mike Birch.
Construido en sándwich de espuma/carbono/Kevlar/epoxi, sólo desplaza tres toneladas. Sus voluminosos flotadores y su generoso aparejo le confieren un excelente rendimiento, al tiempo que garantizan un excelente comportamiento cuando navega mar adentro.
Un gran reto para salvar este trimarán
Volcado por la tormenta tras romper su ancla, este Scout 38 se encuentra en mal estado. No parece haber sufrido demasiado al volcar y encallar en la arena. La estructura está intacta y el interior no se ha ahogado.
La botavara y las velas estaban resguardadas en el casco central cuando el huracán azotó las Granadinas. Pero durante la varada, el techo del CP resultó dañado.
La primera fase de este insólito proyecto consiste en limpiar la playa y trasladarla a una obra:
En la isla no hay grúas, así que nos pusimos en contacto con una empresa de una isla vecina especializada en este tipo de operaciones, pero sus tarifas son prohibitivas.
Y a Jake le gusta hacer las cosas por sí mismo. Así que ideamos una serie de planes para devolverlo al lugar correcto, incluidas anclas mar adentro y una gran carretilla elevadora.
Mientras tanto, Jake desmontó el motor para asegurarse de que no había sufrido demasiados daños, una operación nada sencilla en un barco volcado. Excavó un poco y encontró el mástil en la arena, en dos piezas. Calculamos que los trabajos para ponerlo en condiciones de navegar durarán unos meses. Una vez terminado el reacondicionamiento, nos gustaría hacer algún trabajo de chárter orientado al circuito de regatas en el Caribe. El barco es excepcional, y nos encantaría poder compartir el placer de navegar a bordo.
