El almacenamiento invernal es un periodo clave para cualquier navegante. Además de preparar la embarcación para el frío, hay que pensar en el almacenamiento de los equipos, que suelen ser voluminosos y sensibles a las inclemencias del tiempo. Herramientas, velas, equipos de seguridad, ropa técnica... protegerlos durante la estación fría es esencial para prolongar su vida útil. He aquí un resumen de las mejores soluciones en tierra, así como algunos consejos para un almacenamiento invernal óptimo.
Invernar una embarcación es mucho más que ponerla a secar. Almacenar su equipo en tierra es un paso esencial para preservarlo y prolongar su vida útil. Ya opte por una solución doméstica, el alquiler de un garaje o un contenedor junto al mar, cada opción tiene sus ventajas y sus limitaciones. Lo importante es elegir una solución que se adapte a la naturaleza del material y a las condiciones climáticas de la región, respetando algunos principios sencillos:
- Proteger las velas para evitar arrugas y moho, enróllalos bien y guárdalos planos en bolsas de gasa o fundas transpirables. Asegúrate de que la habitación está bien ventilada.
- Aprovechar al máximo los espacios pequeños envasado al vacío: para la ropa de mar, utilice bolsas de vacío para protegerla de la humedad y ahorrar espacio al mismo tiempo.
- Mantenimiento invernal almacenamiento: aproveche el almacenamiento para realizar el mantenimiento de piezas como los chalecos salvavidas (hincharlos) y las baterías (comprobarlas y recargarlas periódicamente).
- Garantizar la ventilación en garajes cerrados, asegúrate de dejar espacio suficiente para que circule el aire. Utiliza bloques de ventilación o absorbentes de humedad para evitar la condensación.
- Elevación del equipo en caso de inundación o humedad en el suelo, coloque palés debajo de las cajas para evitar que el equipo toque directamente el suelo.
¿Por qué descargar los equipos para almacenarlos en invierno?
Rara vez se recomienda dejar todo el equipo a bordo durante el almacenamiento invernal. La humedad, la falta de ventilación y el riesgo de moho hacen que esta solución sea poco fiable. Además, si se almacena durante mucho tiempo en tierra firme, las variaciones de temperatura pueden dañar algunos equipos. Además, la descarga facilita el mantenimiento de la embarcación y libera espacio para posibles reparaciones. Antes de descargar el equipo, haga un inventario completo de lo que va a dejar y lo que va a retirar. Así evitará olvidar nada cuando vuelva a poner la embarcación en el agua en primavera.
Almacenamiento en casa durante el invierno
Para los navegantes que disponen de mucho espacio en casa (garaje, sótano), el almacenamiento doméstico sigue siendo una opción sencilla. La mayor ventaja es que puedes vigilar tu equipo y tenerlo listo para cualquier mantenimiento o inspección invernal. Sin embargo, se plantea la cuestión del espacio: entre velas, cojines y equipos electrónicos, este almacenamiento puede ocupar rápidamente mucho espacio.
Alquilar un garaje o un box para la temporada
Alquilar un garaje o un almacén puede ser una alternativa interesante para pasar el invierno. Sin embargo, es fundamental asegurarse de que el lugar sea seco y seguro. El almacenamiento a largo plazo exige prestar especial atención a las condiciones de humedad y temperatura, que pueden variar a lo largo de los meses.
Alquilar un contenedor marítimo para el invierno
Cada vez son más los proveedores de servicios náuticos, concesionarios y puertos secos que ofrecen el alquiler de contenedores para almacenar el equipamiento de la embarcación cerca de la costa. Esta solución es muy popular durante los meses de invierno, ya que permite almacenar todo el equipo cerca de la embarcación, protegiéndolo al mismo tiempo de los elementos. Aunque los contenedores marítimos son robustos, requieren algunas precauciones para garantizar un almacenamiento óptimo.
Almacenamiento en seco en una caja específica
Algunos puertos secos ofrecen soluciones completas para invernar su embarcación, incluido un pañol cercano para guardar su equipo. Esto le permite tener a mano todo lo que necesita para mantener su embarcación durante el invierno, evitando al mismo tiempo la necesidad de transportar equipos pesados. Para reducir costes, considere la posibilidad de compartir un pañol con otros navegantes. Así optimizará su presupuesto y podrá acceder fácilmente a su material.